Sazona el agua a tu gusto. Por ejemplo, un litro de agua con 25 gr de sal.
Pon la harina de maíz en un bol y ve añadiendo agua sazonada poco a poco mientras mezclas con las manos. Así hasta conseguir hacer una bola.
Deja reposar la bola de masa tapada con un trapo. Si lo dejas una hora mejor que si la dejas solo 15 minutos.
Divide la bola en porciones y aplasta cada una de ellas hasta conseguir hacer una tortilla plana. Quizás tengas que humedecerla si estuviera muy quebradiza o quizás tengas que espolvorear con un poco de harina si estuviera demasiado húmeda.
Calienta una sartén y haz las tortas en ella por ambos lados sin usar ningún tipo de grasa.
Corta el lomo en tiras.
Prepara una sartén a fuego fuerte con un chorro de aceite de oliva.
En ella saltea las tiras de carne y el ajo picado. Salpimienta.
Añade un poco de pimentón.
Antes de que se queme el pimentón añade un poco de agua.
Incorpora la cebolla caramelizada y mezcla.
Rellena las tortas con este salteado.
Añade trocitos de queso brie y hojitas de tomillo fresco.
Decora con un chorrito de aceite de oliva y sirve.
Esta es la harina de maíz que he usado. Es harina precocida de maíz blanco. En Venezuela la usan para sus famosas arepas.
Tras mezclar la harina con el agua sazonada, se hace una bola de masa y se deja reposar. Se divide en porciones, se aplana y se ponen en la sartén.
Cuando las tortas estén hechas, sácalas de la sartén y están listas para rellenar con lo que quieras.
El lomo de cerdo cortado en tiras salteado con ajo picado, sal y pimienta, pimentón, un chorizo de agua y la cebolla caramelizada.
La torta montada con el "guisaillo" de lomo de cerdo y el queso brie y decorada con unas hojitas de tomillo fresco y unas gotas de aceite de olvia crudo.
Esta es una receta tradicional que se ha hecho en casa de mis padres desde que tengo recuerdos. Normalmente la comíamos caliente pero siempre me gustó también comerla fría.
En esta ocasión la he preparado con una paletilla, pero la puedes hacer con cualquier otra pieza del cordero: cuello, pierna, costillas.
Ingredientes:
Pierna o paleta de cordero (1,3 kg)
Vinagre (medio vaso)
Vino blanco (1 vaso)
Ajos (3)
Laurel (2 hojas)
Orégano seco (1 cucharada)
Tomillo seco (1 cucharada)
Pimentón dulce (media cucharada)
Aceite de oliva
Sal al gusto
Pimienta negra
Perejil fresco
Preparación:
Troceamos el cordero (lo puede hacer el carnicero).
Lava muy bien los trozos de cordero y los ponemos en una olla.
Añadiremos el vino blanco, el vinagre, los ajos troceados, el orégano y el tomillo, el pimentón, sal y pimienta.
Cubrimos con agua.
Tapamos el recipiente y reservamos en la nevera toda la noche.
Ponemos el recipiente a fuego alto (9/10).
Añade el laurel.
Cuando empiece a hervir bajamos a 4/10.
Al principio puede producirse algo de espuma que retiraremos.
Dejaremos cocinar 90 minutos.
Destapa y sube el fuego al máximo para que reduzca casi todo el caldo y quede solo un poco de caldo muy concentrado, casi como un jarabe.
Añade un chorizo de aceite de oliva.
Deja reposar.
Sirve.
Yo voy a hacer la receta con esta paletilla pero puedes usar cualquier parte del cordero.
El cordero troceado se introduce en una olla y se añade: sal y pimienta, ajos, tomillo y orégano secos y pimentón dulce.
Después añado los líquidos: vinagre de Jerez, vino fino y agua hasta casi cubrir la carne.
Dejo marinar el cordero durante toda la noche y al día siguiente la pongo a fuego alto hasta que comience a hervir.
Al principio se formará espuma que debemos eliminar.
Aqui ya he retirado la espuma. Ahora a tapar y bajar el fuego a 4/10 durante unos 90 minutos.
Ya está hecho el cordero, la carne se desprende fácilmente del hueso.
Subo el fuego para reducir la salsa.
Una vez reducida la salsa incorporo un chorro de aceite de oliva y un poco de romero fresco.
El lomo debes aromatizarlo con pimienta y si quieres con alguna hierba aromática: tomillo, romero, orégano, salvia... lo que quieras.
En un bol mezcla sal gorda con sal fina. Suficiente para cubrir el lomo (normalmente necesitaras el doble de peso de sal que de lomo para cubrir bien).
Humedécela un poco y mezcla bien.
Pon una capa de sal en la fuente de horno, coloca el lomo encima y cúbrelo con un dedo de sal bien compacta.
El horno debe estar a 180º C (356º F) y para mi gusto (y mi horno) debo asarlo 1 hora por kilo de peso de la carne (2,2 Libras), aunque debes probar tu horno con esta referencia. Si te queda muy seco la siguiente vez déjalo menos tiempo y si queda crudo déjalo algo más.
Después hay que dejar reposar hasta que enfríe.
Retirar la sal y secar.
Cortar en filetes muy finos.
Con sal y limón está súper rico pero se puede servir con patatas, una ensalada o a variadas salsas.
Mezclar los ingredientes haciendo una bola y sin amasar.
Reposo:
Tapado en un bol durante 1 hora.
Estirado:
Corta la masa en dos y con un rodillo y sin usar harina estira hasta hacer placas grandes y finas (2 mm).
Cortar:
Círculos de 12 cm para las pequeñas.
Círculos de 15 para las grandes.
Los recortes se amasan y cortan de nuevo o se aprovechan para hacer tiras o galletas (pincelando con huevo y añadiendo azúcar y anís).
Relleno:
Rellena los círculos sin llenarlos demasiado porque sino no se podrán cerrar y dóblalos por la mitad.
Moja los bordes con un poco de agua y séllalos plegándolos o con un tenedor.
También se puede hacer el "repulgue": doblar cerrando el contenido sin dejar aire. Hacer un pliegue en la punta y seguir haciendo los pliegues hasta llegar al otro extremo.
Prepara una sartén con aceite de oliva a fuego medio-alto (7/10).
Sofríe la cebolla y el ajo picados.
Cuando este sofrita añade una cucharada de harina y la leche caliente.
Mueve continuamente y a fuego medio (5/5) para que la leche vaya evaporando y se vaya haciendo una especie de bechamel solida.
Incorpora el salmón desmigado.
Sigue moviendo, reduciendo la salsa y rompiendo los trozos de salmón más grandes.
Cuando haya espesado suficientemente pasa la masa de las croquetas a una fuente y pon encima papel film tocando con la superficie para que no se seque, oxide ni endurezca demasiado.
Deja que enfríe y refrigera. Yo lo dejo toda la noche en la nevera.
Dale forma a las croquetas.
Pásalas por harina, huevo batido y pan rallado.
Fríelas en abundante aceite caliente hasta que estén doradas a tu gusto. Apenas 1 minuto.
¿Quién no sabe en España como se hace la mahonesa?
Os parecerá una estupidez que publique una entrada del blog contando como hacer esta archiconocida salsa (en nuestro país). A mi también me lo parece, pero como muchos platos llevan mahonesa o se acompañan de ella, pues quiero explicar como la hago yo, para que cualquier despistado que no sepa hacerla tome nota.
Además mi amiga Mary, una chica de Eureka, California, en los Estados Unidos que pensaba que la salsa mahonesa era imposible hacerla en casa, que era una cosa que se compraba ya preparada (claro que también pensaba que las gambas eran solo la colita pelada y cuando la llevé a un chiringuito a la playa y las vio completas, con su cabecita, sus ojitos, sus bigotes y patas, no se lo podía creer).
En fin, más que nada, pongo esta receta por algunos seguidores habituales del blog que son foráneos y pueden pensar lo mismo que esta amiga mía.
La receta original es con aceite de oliva, pero yo prefiero hacerla con aceite de girasol porque es más suave, con el aceite de oliva (también dependiendo del tipo) sale demasiado fuerte para mi gusto. Se le puede añadir un poco al final.
Ah, sobra decir que la mahonesa casera hay que consumirla cuanto antes y no conservarla más de 24 horas en la nevera. Puede producir problemas por Salmonella.
Ingredientes:
Un huevo
Aceite de girasol o de oliva -que no tenga mucho sabor- (200 ml)
Vinagre (al gusto)
Sal (al gusto)
Pimienta negra (al gusto)
Preparación:
Pon el huevo en el interior de un vaso de la trituradora.
Añade el aceite, el vinagre, la sal y la pimienta molida.
Tritura al principio sin mover la hélice del fondo del recipiente. Poco a poco irá montando (haciéndose la mayonesa) y podrás ir subiendo para abarcar todo el aceite añadido.
Prueba la sazón por si quieres añadir algo más de sal, pimienta o vinagre.
NOTA: Es muy importante que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente. Si esto no es así no saldrá la mayonesa, se "cortará".
Limpia bien los morros y comprueba que no tengan pelo alguno. Si lo tuviera hay que quemarlo o afeitarlo. Enjuaga.
Blanquea el morro: introdúcelo en agua hirviendo durante unos 10 minutos. Tira el agua donde has blanqueado y enjuaga bien los morros.
En una olla rápida a fuego fuerte pon agua limpia con una cebolla cortada por la mitad, un puerro, 2 zanahorias y 2 ajos (todo pelado) y los morros.
Tapa y cuando haya presión baja el fuego a 3/10 y deja cocer durante 50 minutos. En olla tradicional tardaría dos horas y media en cocer.
Mientras prepara el refrito en una cazuela a fuego 7/10 con un poco de aceite de oliva de una cebolla picada, un puerro, dos ajos, un pimiento verde y otro rojo.
Cuando esté sofrito añade una cucharadita de pimentón picante.
En un minuto, antes de que se queme el pimentón añade una copa de brandy y deja que evapore el alcohol.
Incorpora el tomate pelado y picado y deja que se fría.
Cuando hayan pasado los 50 minutos de cocción destapa la olla rápida y separa los morros de las verduras y el caldo.
Comprueba que los morros están tiernos.
Tritura el sofrito junto a las verduras de cocción (ayúdate añadiendo un poco de caldo de cocción si es necesario).
Vierte todo este triturado a una cazuela.
Retira un cartílago que tienen los morros bajo la nariz.
Trocea los morros y pásalos por harina, huevo y fríelos en aceite de oliva o girasol bien caliente.
Cuando estén dorados retíralos a un papel absorbente.
Introduce los morros rebozados en la cazuela con la salsa añadiendo más caldo si fuera necesario.
Deja tapado a fuego bajo (3/10) unos 10 minutos.
Sirve acompañado de patatas fritas y adornando con perejil picado
El morro ha de estar muy limpio y muy bien depilado, como las piernas de una top-model.
Es conveniente "blanquear" los morros hirviéndolos unos 10 minutos, tirar el agua y enjuagar la carne.
Después de "blanquear" los morros, bien limpios, procederemos a cocerlos. En olla rápida 50 minutos y en tradicional unas 2,5 horas.
Ajo, pimiento verde y rojo y puerro. Todo bien picado y listo para comenzar un buen refrito.
Tras mochar la verdura añadimos una cucharadita de pimentón picante, una capita de brandy y un tomate pelado y bien picado.
El refrito preparado para formar parte de la salsa.
El morro cocido tras su paso por la olla rápida. Puedes comprobar si está tierno dándole algún corte. Si no lo estuviera dale más tiempo de cocción.
Cuela el caldo y añade la verdura cocida al refrito para triturarlo todo junto y así aprovecharla para la salsa.
El caldo resultante de la cocción servirá para regular el espesor de la salsa de nuestros morros y podemos congelarlo para su uso en otras preparaciones.
Refrito y verduras preparados para ser triturados y pasar a formar parte de la salsa.
Los morros cocidos los troceamos a un tamaño apropiado para que sean fáciles de tomar.
Para rebozarlos hay que pasarlos primero por harina. Yo utilizo harina de trigo duro, la que usamos para freír el pescado, pero puedes usar harina normal.
Tras pasar por harina se pasan por pan huevo batido.
Fríe los morros en aceite de oliva (que no tenga un sabor fuerte) o de girasol.
Los morros rebozados listos para sumergirse en la salsa que hemos preparado.
Rebozados y sumergidos en salsa. Ahora basta con dejarlos aquí unos 10 minutos haciendo chup-chup y listo.
Los morros presentados con la guarnición de patatas fritas.