Ingredientes:
- Mantequilla (50 gr)
- Harina de trigo (50 gr)
- Leche (500 ml)
- Sal
- Pimienta negra
- Nuez moscada si te gusta.
- Pon a calentar la leche con cuidado de que no alcance la ebullición y se salga de su recipiente.
- En un cazo a fuego suave (7/10) pon la mantequilla, deja que se derrita y añade la harina. Muévela para que esta se dore un poco.
- Incorpora la leche caliente, toda de una vez y mueve con la varilla dejando reducir el líquido hasta alcanzar el espesor deseado.
- Si la quieres más líquida añade algo más de leche. Si quieres que sea más espesa... déjala un poco más al fuego.
- Ralla un poco de nuez moscada si gustas.
- Salpimienta a tu gusto.
- Si vas a conservarla, corta un pedazo de mantequilla y frota la superficie de la bechamel con ella de forma que quede una fina capa de grasa sobre la superficie que evitará que esta superficie se seque. También puedes tapar con papel film de forma que toque la superficie.
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